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Espontánea para Hector "Últimos paisajes"

Para Héctor Estella Nada ahora te detiene y en tu mirada verde veo lagos salados Ya no te escondes tras los matorrales agostados del verano Y la sombra del árbol africano, Te cobijará cuando hagas un alto en el camino. Pongo mi mano en el surco de tu huella y ya es pasado. Miro a tu espalda mientras te vas por estos pasillos, Donde suave me queda tu paso firme y algo de paz. Mientras te alejas, yo también me distancio, ya de lo irreal, Porque fue, en este tiempo que se acaba, El haber tenido, el haber sido y el haber habido. Ahora, todavía recojo algo del lago de tu tranquilidad El de tus últimas palabras. Ya no te veré más en este cielo anudado de estériles nimbos Ya no pisarás esta tierra seca que nos mancha los zapatos. Antes de abrir la puerta Girarás por última vez tu cabeza… Se ira marchando Primero tu cuerpo Y tu cara ladeada nos dejará por última vez, Tu última sonrisa. No te buscaré más aquí Mientras, Miraré por la ventana este lugar desconocido.

Futuro

A Marisol Llavero Sabía ser niña, puede que no quisiera serlo pero ella era la niña que entonces indagaba en nuestras vidas. Todos buscábamos allí algo que no teníamos o algo que, esencialmente nos faltaba. Ella nos hacía tambalearnos en nuestros miedos. Entonces, sin ningún reparo, nos amparaba un poco, nos protegía, luego nos soltaba al vacío y nos enseñaba a ser valientes. Tocábamos con las puntas de nuestros dedos, sus dedos. ¡No había secretos! yo notaba, Que mientras hablaba, nos entreteníamos en su discurso que  nos ejercitaba en despojarnos de algunas cosas que nos sobraban. Nos esforzábamos en retener cada palabra. En su sonrisa siempre había eso que llaman  FUTURO Antonio Misas Madrid, 8 de julio de 2002

Algunas Veces

Para Ana i. Fraile Morales Algunas veces Sus manos se quedan vacías Y su corazón se cubre de cenizas. Algunas veces Es figura de piedra en sus sueños, Y permanece perdida Buscando el enigma de la dicha. Algunas veces Tiembla mirando a la nada Oyendo palabras mojadas, Viendo como la empapan. Algunas veces Tantea en el mundo ciego Esperando tener entre sus dedos Algo de amor. Algunas veces También son esas veces, En las que la redime el Mundo, Que la espera en su fondo enmarañado. Algunas veces Siente que su cuerpo aun guarda el calor del verano Y que de su corazón, También brotan los manantiales. Madrid, 7 de enero de 2002 Antonio Misas Salas

Ser

A  Andrea Pérez Es desde la desolación, Estampa esta mañana del vértigo que siento Y no soy nada Que miro al mundo, Al gigante lejano, Al padre inalcanzable... Y me regocijo en el oportunismo del tiempo que regresa para hablarme de aquellos preciosos momentos que ya no tengo. Llaman a las barreras de mi alma los lobos imaginarios de mis sueños Asedian mi casa a la luz del día. Y me escondo tras las cortinas, En la espesura. Y me persigue una angustia humedecida En la ciénaga de mis dudas, Porque, Aunque no soy nada, Guardo en un cofre el ser consciente de que yo, Algo importo. Y comienza el corazón a vertebrarse. Madrid, 30 de agosto de 2001 Antonio Misas Salas.